Relato erótico gay mexicano.

Cuando terminamos el Bachillerato, decidimos hacer un viaje de fin de curso a Cartagena antes de entrar en la universidad.

Me permito comentar algunas supuestas pistas para atrapar a la pareja cuando viene de otro catre.

Hay cosas que todos tendríamos que probar al menos una vez en la vida, cosas sexuales que normalmente se convierten en fantasías que muy rara vez cumplimos o de las que poco hablamos, y que sin embargo pueden presentarse pero no logramos consolidar por temor a que nuestra pareja sexual nos juzgue de forma errónea.

Cuando estamos completamente desnudos, somos iguales, queremos lo mismo que todo el mundo; aquí les contaré cómo una posible tragedia y prejuicio produjeron un giro de placer inimaginable que me cambió la forma de ver la vida.

Hola mi nombre es Juan Pablo y les contaré lo que me pasó en Ciénaga, Magdalena  en una fiestas típicas de ese municipio caribeño.

Hay cosas que nunca cambian y nos encanta; hay un calendario que lleva ya unos años publicándose periódicamente y que nos hace especialmente felices.

Relato erótico español de un hombre que le encanta tener sexo con habitantes de calle o indigentes, aquí relata una de sus aventuras.

Les contaré cómo de un simple cruce de miradas pasé a ser el amante casi diario de uno de los vecinos "felizmente casado".

Casi todos ya sabemos o al menos hemos escuchado cómo se pone un condón masculino; sabemos abrir el paquete con las yemas de los dedos, no dejar aire en la punta del pene, cubrirlo todo y usar uno para cada penetración, pero y si el pene es grande y se dificulta desenrollarlo?.

Todos los Enero, mi amiga Julia, hace una fiesta para recibir el nuevo año con las mejores vibras; ¿Dije fiesta? ¡Son las megas fiestas! Ella es una modelo y Youtuber, por lo que tiene conocidos a morir.

Para nadie es un secreto que en época de carnaval en Barranquilla, la ciudad se pone a reventar.

La forma de mamármela es simplemente impresionante, la chupa hasta el tronco y luego ese delicioso culo que me lo comí hasta reventarlo como él quería.

Dejando de lado las críticas a nuestro congestionado trasporte masivo de Bogotá, lo que les voy a contar pasó de verdad hace un año, más o menos.

No lo puedo evitar, todos los días quiero tener una buena polla dentro de mi.

Mi nombre es Federico y soy famoso entre mis amigos(as) por seducir celadores de sus edificios y de cualquier propiedad si soy honesto, donde pongo el ojo pongo la boca.

Parece difícil de creer, pero la verdad es que el sexo anal es uno de los placeres más grandes que hay en la vida, lo que sucede es que se tiene esta falsa idea de que se trata de una práctica sumamente dolorosa.

Aún existen muchos mitos sobre la transmisión del VIH que van desde cosas tan absurdas como que hay “bananas con sangre que transmiten el virus” hasta cosas que podrían sonar más razonables como compartir una navaja de afeitar con alguien que vive con VIH.

Tenía a Marcelo sentado en mi polla cabalgándome y follándole su rico culito, mientras le contaba mi experiencia en la casa de Rashîd el francés.

Para los que no saben, cuando uno no tiene vih, se hace unos exámenes de rutina extra y si todo sale bien puede tomar una pastilla de un medicamento que se llama Truvada (1 pepa al día) y eso no lo deja infectar del sida, eso se llama PrEP.

Aventuras en el cerro "El volador" de Medellín,  una zona de levante que puedes disfrutar en tus visitas a la capital antioqueña.

Una de las más curiosas tiene que ver con la estadística que precisa que solo un hombre de cada 400 es lo bastante flexible como para darse a sí mismo placer oral.

Lo busque y lo conseguí, fui al parque para que el chico que me rompió el culo por primera vez lo vuelva a hacer.

El perrito, el misionero o el pasivo boca abajo y el activo sobre él, no son las únicas poses existentes para practicar el sexo anal.

Siete centímetros dentro del ano y muy cerca de sus genitales se encuentra la puerta al máximo placer del hombre.

Luis es un chico al que conozco desde que era un niño, actualmente tiene 22 años, yo 43 y todo paso en una noche de rumba.

En la época en la que se conquista a través de una pantalla parece que la monogamia poco a poco se desdibuja.

Por Madison Moore (Thought Catalog).